EL CAOS. – El arranque de la gira de Claudia Sheinbaum en Ciudad Juárez se convirtió en un caos. A las afueras del estadio, el desorden fue evidente: empujones, puertas forzadas y un diputado, Pedro Torres, envuelto en el borchinche por tratar de abrir el acceso. La organización brilló por su ausencia; ni la prensa podía entrar sin que la pasearan de un lado a otro. Protección Civil estatal estaba ahí, pero sin capacidad real de imponer orden, también molestos porque los organizadores nacionales se movían como si fueran dueños del lugar. El mensaje fue claro, la gente se impuso, no la logística.

Otto Rodríguez, otro que no entró

Ni los funcionarios se salvaron del maltrato. Otto Rodríguez, secretario de Administración del Congreso, se llevó la mala experiencia de quedarse a las puertas. Aunque intentó con respeto pedir acceso, los morenistas lo ignoraron. No hubo cortesía, ni consideración a su cargo. En este tipo de eventos, los organizadores mandan y el protocolo institucional se lo pasan por alto.

El regreso del “Dedotes” González Cruz

Entre los asistentes llamó la atención la presencia de Roberto González Cruz, mejor conocido como “Dedotes”. El policía, señalado en su momento por un escándalo sexual con una compañera en CDMX, reapareció sonriente en Juárez. Se tomó fotos con jóvenes y fue reconocido por varios. Lo curioso es que en lugar de estar marcado por la polémica, parece haber capitalizado la fama. Y ojo, en política no sería raro verlo como regidor, incluso alcalde en el futuro, porque aquí hasta los escándalos sirven como trampolín.

La porra de Maru en territorio guinda

El toque más pintoresco fue la porra de Maru Campos en un evento de Sheinbaum. Los panistas, vestidos de blanco, con batacas y reguiletes, ocuparon los mejores asientos bajo la sombra mientras la militancia de Morena aguantaba el sol. Al grito de “¡Vamos Maru!”, calmaron los abucheos de los guindas y al final salieron satisfechos, aunque la gobernadora ya no estaba. En los pasillos políticos se habla de un acuerdo adelantado, que Morena entregue algo de juego a Maru hoy, a cambio de que Chihuahua se pinte de guinda en 2027. Si es rumor o estrategia, el tiempo lo dirá.