Estados Unidos., Las políticas antiinmigración impulsadas por el gobierno de Donald Trump han generado una ola de rechazo internacional debido al trato que reciben los ciudadanos indocumentados por parte del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de Estados Unidos conocido como ICE. Este clima de tensión ha provocado que figuras de la farándula como Mark Ruffalo, Selena Gomez, Susan Sarandon y Richard Gere expresen abiertamente su inconformidad ante lo que consideran humillaciones y violaciones a los derechos humanos.

En días recientes la controversia creció cuando la administración estadounidense utilizó un fragmento viral de la canción Juno de Sabrina Carpenter como acompañamiento en un mensaje político que mostraba redadas, protestas y detenciones de migrantes. El contraste entre las escenas tensas del video y la línea Have you ever tried this one conocida por su carácter juguetón durante los conciertos de la cantante provocó un fuerte impacto en el público. La artista suele representar un arresto ficticio con esposas rosas de peluche en un momento que los fans celebran con humor, lo que hizo aún más discordante su uso en un contexto de detenciones reales.

La ganadora del Grammy reaccionó de inmediato a través de X donde publicó un mensaje contundente en el que pidió que no se usaran ella ni su música para favorecer lo que describió como una agenda inhumana. Carpenter calificó el video como malvado y repugnante dejando claro que rechaza tanto el uso de su obra como el mensaje completo difundido por la Casa Blanca.

La respuesta del público no se hizo esperar. Fans colegas de la industria y usuarios en general criticaron que un verso asociado con diversión brillo y cercanía con la artista fuera colocado sobre imágenes de arrestos. Para muchos resultó ofensivo que un tema que se ha convertido en un símbolo festivo dentro de las presentaciones de Sabrina fuera empleado para justificar acciones migratorias. Juno lanzada en agosto y convertida en uno de los himnos del verano pasado suele abrir los conciertos de la cantante y es parte esencial de la conexión lúdica que mantiene con su audiencia.