Chihuahua

Enraizado la Verdad: Prefencia de Élite, luchas Selectivas;El Marqués de Palacio: ¿Príncipe o Político?

Prefencia de Élite: Luchas Selectivas: En medio de un contexto en el que el Poder Judicial a nivel nacional lleva a cabo manifestaciones y paros por el  retiro de fideicomisos, resulta peculiar que el Partido Acción Nacional (PAN) haya respaldado estas acciones. Sin embargo, la sorpresa radica en que estas manifestaciones se justifican bajo la premisa de luchar por los derechos de los empleados de un ente autónomo, cuando en realidad, en nuestra propia casa, en el municipio de Chihuahua, cientos de empleados continúan sin obtener una basificación, soportando contratos eventuales durante períodos de hasta 10 años.l en el gobierno.

Alfredo Chávez, coordinador del PAN, parece reacio a asumir la responsabilidad que recae sobre el estado y el municipio para cumplir con la ley y ofrecer una base a estos empleados que siguen siendo víctimas de esta práctica ilegal por parte de las instituciones gubernamentales. Este doble rasero resulta inquietante y plantea interrogantes sobre la coherencia en la defensa de los derechos laborales.

Al cuestionar a Chávez sobre esta problemática y la aparente doble moral en la que incurre al respaldar a empleados de instituciones autónomas mientras ignora a sus propios colaboradores. Su respuesta, un intento de justificar su postura, se enfocó en la defensa de los puestos de los policías municipales y estatales. Si bien es cierto que estos servidores públicos son merecedores de derechos y protecciones laborales, no se puede ignorar el hecho de que existen otros empleados que también requieren de atención y regulación adecuada.

El mensaje aquí es claro: la defensa selectiva de los derechos laborales solo sirve para perpetuar una brecha entre ciertos sectores y otros, dejando de lado a quienes, independientemente de su función, merecen igualdad de trato. El PAN, al igual que otras fuerzas políticas, debe recordar que la lucha por los derechos laborales no debe basarse en la preferencia por una élite, sino en la búsqueda de justicia y equidad para todos los trabajadores, sin excepción.

El Marqués de Palacio: ¿Príncipe o Político?

Recientemente, el comportamiento del secretario de gobierno estatal, Santiago de la Peña, ha provocado asombro y desconcierto entre los observadores políticos y los invitados a un evento con políticos de antaño en palacio Estatal; En un gesto que parecía sacado de la realeza británica, De la Peña llegó notablemente tarde al evento y, para sorpresa de muchos, ni siquiera se molestó en saludar a los presentes.

 

Su actitud, que algunos describieron como arrogante, sugiere un aire de superioridad que contrasta con las normas de etiqueta y cortesía que se esperan en un entorno social. Voltear la cara a los invitados y actuar como si estuviera por encima de las formalidades comunes, crea una impresión negativa y levanta interrogantes sobre su habilidad para gestionar relaciones políticas.

 

La importancia de las relaciones sociales en la política no puede subestimarse, especialmente en tiempos de elecciones. El comportamiento de De la Peña plantea la cuestión de si entiende la importancia de las interacciones amigables y constructivas en su papel como secretario de gobierno.