Advierte Arturo Medina que nueva Ley General de Aguas pone en riesgo al campo chihuahuense
Chihuahua, Chih., El coordinador del Grupo Parlamentario del PRI en el Congreso del Estado, Arturo Medina Aguirre, alertó que la nueva Ley General de Aguas impulsada por el gobierno federal representa una amenaza directa para el campo de Chihuahua, ya que centraliza el control del recurso hídrico, vulnera derechos adquiridos y encarece la producción agrícola y ganadera.
El legislador señaló que no puede permitirse que las decisiones sobre el uso del agua se tomen desde escritorios en la Ciudad de México, pues ello afectaría a quienes dependen del riego para mantener sus cosechas y su sustento. Advirtió que la iniciativa prohíbe transferir concesiones de agua incluso cuando cambie el propietario o se rente la tierra, medida que, dijo, reduce el valor de las parcelas y afecta de manera directa a ejidos y pequeños productores.
Medina subrayó que la propuesta de ley concentra en la Comisión Nacional del Agua (CONAGUA) la facultad de otorgar, prorrogar o cancelar concesiones, además de imponer sanciones, eliminando atribuciones de los organismos locales y módulos de riego. Aseguró que esto generará más trámites, mayor incertidumbre y una menor capacidad de respuesta en las zonas rurales.
El diputado priista también advirtió que la iniciativa crea nuevos delitos hídricos que podrían criminalizar a los productores por interpretaciones discrecionales de la autoridad. Señaló que, además, se les impondrán mayores costos por la obligación de instalar sistemas de medición, presentar reportes y cumplir con nuevos requisitos burocráticos.
“Esta reforma no reconoce el esfuerzo del productor, lo criminaliza. En lugar de brindar certeza y apoyo, genera miedo a perder el agua, la tierra o incluso la libertad”, expresó Medina.
El coordinador reiteró que el PRI mantendrá su respaldo total a las familias del campo, acompañando a productores, ganaderos y campesinos en la defensa de sus derechos y patrimonio. Afirmó que su bancada trabajará junto al sector agropecuario para detener cualquier intento de usar el agua como instrumento de control político.
“El agua es vida y es producción, no un mecanismo de presión. Vamos a defender al campo de Chihuahua con firmeza, con argumentos y junto a quienes todos los días trabajan la tierra y cuidan el ganado”, concluyó.









