La Facultad de Medicina y Ciencias Biomédicas de la Universidad Autónoma de Chihuahua (UACH) montó un altar en honor a las personas que fallecieron sin identidad, reconociendo su contribución silenciosa al aprendizaje de la ciencia médica.
Autoridades educativas señalaron que en la formación de los futuros profesionales de la salud, no solo se estudian las funciones del cuerpo humano, sino también el valor de la vida y la dignidad que merece cada ser humano, incluso después de la muerte.
El altar simboliza un acto de empatía, memoria y respeto hacia quienes, sin nombre ni reconocimiento, permitieron que estudiantes y profesionales pudieran adquirir conocimientos vitales para la medicina.
Cada vela encendida representa una vida sin registrar, cuyo significado se mantiene a través del aprendizaje que aportó al desarrollo de la ciencia médica, destacaron los alumnos que participaron en la elaboración del altar.
Con esta actividad, la facultad refuerza la importancia de la humanización de la enseñanza médica, recordando que detrás de cada descubrimiento científico hay personas, muchas veces anónimas, que hicieron posible el conocimiento adquirido.









